EL SENTIMIENTO, UN VALOR NECESARIO EN LA CONCORDIA Y LA RELACIÓN HUMANA

SENTIR ES VIVIR

PRESTAR NUESTROS OÍDOS A QUIEN ESTÉ NECESITADOS DE ELLOS SERÁ PRUEBA EVIDENTE  DE NUESTRA EVOLUCIÓN Y DEL GRADO DE MADUREZ ALCANZADO HASTA EL PRESENTE

Este sencillo libro no es, en modo alguno, consecuencia de la inteligencia o del raciocinio −de menor trascendencia cuando los comparamos con el sentimiento−, sino que ha primado este sentimiento en cuanto a la forma de sentir y entender cada uno de los temas tratados. Desde esta particular visión, este libro abrirá sus ojos al mundo.

Porque sentir es vivir: vivir lo que ves; vivir la realidad; observar a las personas necesitadas; no ponernos en primera persona; decirle al ego, ese indeseable compañero, que busque mejor cobijo. Decirle también al orgullo, a la soberbia, a la prepotencia y al egoísmo, que vuelvan mañana; hoy estoy muy ocupado…

Pero no dejemos escapar la posibilidad de atrapar fuertemente entre nuestras manos a esos otros grandes personajes del humanismo, como son la comprensión, la tolerancia, la responsabilidad; o a estas grandes compañeras, como son la humanidad y la humildad. Estos valores se repiten, bajo diferentes enfoques, en todos los libros publicados. Este es el sentido y el sentimiento de todos ellos.

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-Antes de herir a tu prójimo intenta sentir y vivir su sufrimiento. Si a pesar de ello, necesitas o deseas herirlo, cuestiónate el grado de irracionalidad que vive en ti. ¡No te engañes!

No hablemos tanto de amar y más de comprensión; para evitar que el amor muera por falta de comprensión.

-Sí no te conoces a ti mismo, ¿cómo pretendes conocer y prejuzgar a tu semejante?

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